Por fin tienes contigo a ese bebé que tanto has esperado y ahora todo gira en torno a esa pequeña personita. Debes cuidar y disfrutar de ella, pero también cuidar de ti. El embarazo y el parto suponen un gran cambio para tu cuerpo y suelo pélvico. Así que sigue estos 8 consejos para cuidar tu suelo pélvico en el posparto.
Desde el día del parto y durante las primeras semanas de posparto. Debes tener especial cuidado con tu cuerpo, para que se recupere de forma óptima. Recuerda que durante el embarazo y el parto, el espacio comprendido entre el tórax y la pelvis ha sufrido una serie cambios y ha estado sometido a mucha presión, tensión y estiramiento.
El posparto es una etapa de adaptación tanto física como mental. El descanso es fundamental en esta fase. El organismo necesita un tiempo para recuperarse de todos los cambios que ha sufrido hasta este momento.
8 Consejos para cuidar tu suelo pélvico en el posparto
1. Descansa y pide ayuda
El descanso es primordial en esta etapa, sobre todo durante los primeros días tras el parto, así que no dudes en pedir ayuda. No se trata de estar inmóvil, pero recuerda que tu cuerpo necesita tiempo para recuperarse. Puedes dar paseos cortos, esto va a favorecer la circulación y a evitar problemas vasculares. Pero evita estar de pie por tiempos prolongados, las articulaciones de la pelvis, los ligamentos y músculos del abdomen y suelo pélvico están alterados y si los sometes a una sobrecarga puedes afectar su capacidad de volver a la normalidad.
2. Cuida tu postura
Intenta mantener una postura correcta en todas las posiciones, tumbada, sentada, de pie y cuando estes dando pecho.
Recuerda que una mala postura puede afectar al suelo pélvico. Como consejo básico, intenta tener la espalda lo más recta posible y elongar tu columna como si crecieras, intenta siempre distribuir el peso de tu cuerpo sobre las dos piernas de forma uniforme o sobre los isquiones si estas sentada.
Para tumbarte y levantarte de la cama es importante que lo hagas poniéndote primero de lado y luego te ayudes de los brazos para incorporarte. Así protegerás a tu suelo pélvico y abdomen.
Los cojines y almohadas especiales para el embarazo y el posparto, son de gran ayuda para mantener y corregir las posturas. No dudes en usarlos cuando te haga falta.
3. Activa tu faja abdominal
Puedes reactivar tu faja abdominal desde el día del parto. Obviamente no lo vas a hacer practicando abdominales tradicionales, estos ejercicios están absolutamente contraindicados en el posparto.
Para reactivar tu faja abdominal puedes hacer ejercicios de respiración, los puedes realizar en diferentes posturas según avanza el posparto. Es importante respetar siempre la postura y mantener la columna y la pelvis en una posición neutra.
Empieza practicándolos boca arriba por ejemplo, haz una inspiración profunda y durante la espiración intenta contraer la parte baja de tu abdomen intentando llevarla hacia adentro.
4. Activa tu suelo pélvico
Durante el posparto y desde el día del parto puedes empezar a activar tu suelo pélvico. La contracción debe ser suave, mantenida durante unos segundos y sin que llegue a provocar dolor.
Los ejercicios de Kegel, van a permitir que se mejore la circulación en esta zona, favoreciendo así la diminución del edema, el dolor y la cicatrización en caso de desgarro o episiotomía.
5. Protege tu suelo pélvico durante los esfuerzos
Durante las primeras semanas de posparto deberías evitar hacer grandes esfuerzos o cargar peso. Pero hay cosas que no vas a poder evitar hacer cómo cargar a tu bebé, estornudar o toser.
Cuando tengas que cargar a tu bebé intenta mantener una postura correcta. Hazlo con la columna y la pelvis en una posición neutra, contrae tu abdomen y suelo pélvico antes de levantar tu bebé y cuando ya lo tengas en brazos mantén de nuevo tu columna elongada, distribuye el peso sobre tus dos piernas o isquiones en caso de que estes sentada y mantén el abdomen activo.
Si estornudas o toses, intenta no encogerte hacia adelante. Mantén la espalda recta, contrae tu abdomen y suelo pélvico mientras dure la tos o los estornudos. Además puedes reforzar la parte baja del abdomen con tu manos.
6. Corrige la maniobra de defecación y evita el estreñimiento
Durante el posparto es importante ir al servicio cuando sientas ganas de defecar y que no lo pospongas. Defecar es uno de los esfuerzos que más puede afectar a tu suelo pélvico durante el posparto, por eso debes intentar hacerlo de la forma correcta.
Coloca un taburete frente al WC que permita una flexión de cadera mayor de 90º, elonga tu columna e inclínala ligeramente hacia adelante, relaja el esfínter anal y puja con la glotis abierta, es decir, dejando que salga el aire. Tomando estas medidas proteges tu suelo pélvico.
Es posible que ir al baño te genere miedo, sobretodo si has tenido una episiotomía o un desgarro. Pero es importante que lo hagas, con cuidado y siguiendo las indicaciones que te he dado antes. El estreñimiento afecta de forma negativa al suelo pélvico y es mejor evitarlo.
7. Cuida tu higiene íntima
Mantener una buena higiene en tus genitales, sobretodo si has sufrido desgarros o episiotomía, es fundamental para prevenir infecciones y favorecer la cicatrización.
Trata de mantener la zona de los puntos limpia y seca. Aunque no es recomendable lavarla más de dos veces al día. Y sigue las instrucciones que te den en el hospital para el cuidado específico de la herida.
8. Usa el cinturón pélvico
Durante el posparto al igual que en el embarazo la pelvis esta inestable, por lo que es recomendable usar el cinturón pélvico. Si tienes dolor su uso esta recomendado durante los 3 meses siguientes al parto. El objetivo del cinturón pélvico es dar estabilidad a la pelvis y favorecer la vuelta a la normalidad de las articulaciones y ligamentos de esta zona.
El cinturón pélvico, no es lo mismo que la faja abdominal. La faja abdominal sólo esta indicada en mujeres con diástasis abdominal y su uso es recomendable sólo durante la primera semana tras el parto. Tras esa semana no es recomendable su uso ya que puede favorecer la debilidad de la faja abdominal muscular.
Fisioterapia del suelo pélvico
Debes acudir a un fisioterapeuta especializado en suelo pélvico, transcurridas seis semanas del parto. Para que pueda hacer una valoración de tu suelo pélvico y crear un plan de tratamiento personalizado para tu caso en particular.
Desde la fisioterapia especializada, podemos ayudarte a resolver ciertas disfunciones que pueden aparecer tras el parto como: la incontinencia urinaria, de gases o de heces; los prolapsos, el dolor durante las relaciones sexuales (dispareunia), dolor lumbopélvico, etc.
Espero que estos 8 consejos te sean de gran ayuda para cuidar tu suelo pélvico durante el posparto. Y no olvides pedir cita con tu fisioterapeuta especializado en suelo pélvico, te ayudaremos a recuperarte de una forma óptima.
Si tienes alguna duda o consulta puedes escribirme a hola@sueloconsciente.com